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Abstract

La Humanidad y el arte van de la mano desde el origen de ésta. No se puede
concebir al Ser Humano en todas sus dimensiones sin en arte. La prolongación de
sus sueños y sus realidades se hacen a través de él.
Esa proyección no tiene barreras. Todos hacemos arte. Es subjetivo y es ahí su
mayor tesoro.
La enseñanza del arte debe darse desde la más temprana edad. Incluso, desde
antes de la concepción. Padre y madre insertos en el arte tendrán generaciones
amantes de la armonía.
El Arte es parte de la Humanidad.